El liderazgo en la Empresa Familiar | #LifelongLearning
Publicado el : 10 de Marzo de 2023
En : General
Por Carlos Folle, profesor de Política de Empresa en el IEEM
Nunca resulta suficiente continuar investigando y sensibilizando sobre la importancia de un líder eficaz para lograr que una organización perdure en el tiempo. Y en las empresas familiares el desafío puede ser aún mayor debido a la superposición entre los roles en la empresa y las personalidades de los miembros de la familia.
Acerco algunas claves que debe fomentar la generación a cargo para lograr la excelencia en el liderazgo de la empresa familiar.
- Modelar la conducta que uno quiere observar. Al igual que en cualquier empresa, en la empresa familiar es prioritario asegurar que todos los miembros de la familia estén alineados y empujando en la misma dirección. Esto se dice más fácil de lo que se hace, ya que las relaciones en la familia son muy intensas e impactan en las emociones. Es importante que el líder logre aunar voluntades. Esto requiere trabajo de su parte —y se empieza desde la cuna—. Educar en los valores y prioridades desde temprano derramará positivamente en la empresa familiar.
- Trabajar para mantener el conflicto familiar fuera de la empresa familiar. El esfuerzo del líder es ser consciente de que la forma de gestionar a la familia es distinta a la de gestionar a la empresa. Las posibles situaciones conflictivas dentro de la familia se deben aislar lo más posible de las relaciones laborales en la empresa. Normalmente, tener los roles y las responsabilidades en la empresa claramente definidos ayuda a preservar estos carriles separados.
- Integrar miembros no familiares al directorio. Dentro de la empresa familiar, particularmente luego de varias generaciones, se van formando sesgos subjetivos en los distintos temas y decisiones que hacen a la empresa. Traer personas de afuera —con las competencias necesarias— que cuestionen con frescura intelectual y criterio ayuda a tener una visión más objetiva y a replantearse algunas prácticas o formas de hacer dentro de la empresa familiar.
- Trabajar la inteligencia emocional. Dentro de la empresa familiar es difícil separar las emociones a la hora de funcionar. A su vez, las decisiones dentro de la empresa impactan en las relaciones familiares. Mantener lo de la familia en la familia y lo de la empresa en la empresa resulta clave para lograr la felicidad en las relaciones familiares y éxitos dentro de la empresa. Para ello es necesario conocer a las personas, entender sus personalidades y buscar como líder empatizar con ellos para lograr los objetivos comunes dentro de la empresa.
- Armar un plan de desarrollo para los futuros líderes. La sucesión o transferencia exitosa del poder de una generación a la siguiente es “el” proceso clave en cualquier empresa familiar. Armar un proceso, comunicarlo y adelantarlo en el tiempo ayuda a identificar el interés y la capacidad de los posibles candidatos a efectos de prepararlos para los desafíos que se vendrán. En la medida en que toda la familia entienda el proceso —aunque no necesariamente lo comparta— las expectativas podrán gestionarse de forma más fácil.
- “Sobrecomunicar” —tanto en la familia como en la empresa— y cumplir. Cuanto más transparente sea el líder familiar y tenga consistencia entre lo que dice y lo que hace generará mayor confianza, y esa confianza afectará positivamente las expectativas de los distintos miembros de la familia. Cuidado con las promesas incumplidas sin un claro justificativo. Cambiar de opinión puede no ser un problema, en la medida que la justificación pueda ser entendida y compartida por las partes involucradas.
En resumen, la recomendación para el líder en la empresa familiar es la de procurar ser justo. A cada cual lo que le corresponde cuando toca. Educar en la justicia dentro de la familia porque es lo que toca. Practicarla tanto en la familia como en la empresa, dando lo que corresponde como padre, hermano o pariente en la familia y como socio, jefe, subordinado y colega en la empresa. Con familiares y no familiares. Procurando objetividad y manteniendo las diferencias personales por fuera de las empresariales para bien de la empresa, y de la familia, en cada circunstancia.
